La Guardia Civil actúa con la contundencia necesaria para desarticular a una banda criminal organizada. Es la operación Kalabrea. Corre 2023, y hasta 16 personas acaban detenidas. ¿Su delito? Robar 17.500 kilos de aceitunas en la comarca madrileña de Las Vegas. No es un hecho aislado. Un año después, en 2024, llega la operación Telones, que acaba con seis detenidos y once investigados por la sustracción de 15.000 kilos de olivas en municipios como Villarejo de Salvanés, Morata de Tajuña, Valdarecete, Brea del Tajo o Torres de la Alameda. Una y otra vez, actúan las mafias aceituneras, que espoleadas por los altos precios del aceite ganan así cientos de miles de euros. Una y otra vez, actúa la Guardia Civil. Y con esa excusa, ahora interviene el gobierno de la Comunidad de Madrid, que preside Isabel Díaz Ayuso, y prepara un decreto para asegurar la trazabilidad de las aceitunas madrileñas con el objetivo de dificultar su lucrativa venta ilegal.
